Os saludamos queridos blogueros. Hoy os queremos hablar sobre el corto ganador de los Goya de
este año.
Dirigido por Pedro Solís, esta
historia fue inspirada por sus hijos, uno de ellos con parálisis cerebral. Este
cortometraje nos enseña a no discriminar
a nadie por padecer cualquier tipo de enfermedad o discapacidad, ya que si
desde que somos pequeños nos educan así no tendríamos prejuicios hacia quienes
las tengan.
Los creadores del corto achacan que
se haya publicado en Youtube su obra porque eso les perjudica en cuanto a
certámenes internacionales.
Nos despedimos hasta la semana que
viene, reflexionad sobre el asunto porque es importante.
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